Artigo Acesso aberto

Jean Wahl. Sobre el papel de la idea del instante en la filosofía de Descartes

2011; Issue: 9 Linguagem: Espanhol

10.18800/estudiosdefilosofia.201101.005

ISSN

2409-1596

Autores

Cristina Alayza, María de la Luz Núñez,

Tópico(s)

Psychological Treatments and Disorders

Resumo

Jean Wahl 96 de nuestros conocimientos y, para mostrar su incertidumbre, nos podremos contentar con hacer ver una sola vez que ellos nos han engañado 3 .En seguida, con la ayuda de un solo punto firme y asegurado, reconstruiremos el mundo 4 .Por ahora, /2/ nos bastará con encontrar en ciertas afirmaciones un punto que no esté asegurado para que todo el sistema de nuestras afirmaciones se desmorone.Uno de los principales motivos de la duda cartesiana es la existencia de la memoria.En efecto, Descartes ve en sí mismo un gran número de conocimientos que le parecen ciertos, pero que no traen con ellos, que no encierran en ellos su propia certeza.Si buscamos los fundamentos de esta aparente certeza, estamos forzados a remontarnos hasta un pasado más o menos lejano y a veces hasta nuestra infancia, en donde nuestro cerebro, naturalmente más falible que hoy en día, recibía más fácilmente las opiniones de otros 5 .Con frecuencia, nos equivocamos porque nos fiamos de nuestra memoria 6 .Son estos prejuicios los que impiden la construcción de la verdadera física.Pero, ¿acaso no todo razonamiento implica, en el fondo, una cierta operación de la memoria?¿Y toda meditación no es ella misma una concatenación de razonamientos?"Yo no encuentro jamás nada si no es por un largo reguero de consideraciones", señala Descartes 7 .Ahora bien, hay conclusiones de las que no podemos dudar al momento en que pensamos en el razonamiento por el cual hemos llegado a ellas; pero, cuando hemos olvidado ese razonamiento, ¿podemos fiarnos de las conclusiones?Este es uno de los principales problemas que se plantea Descartes 8 .Todo discurso implica tiempo.La falibilidad del hombre viene del estar forzado a recurrir a su memoria, de que su atención no es constante, de que su espíritu es lento y limitado, de que no puede fijarse siempre en un mismo pensamiento, de que la atención de su espíritu (mentis 3 VII 18, Pr.I 4, X 510. 4 X 515. 5 IV 114, VI 13, Pr.I 47. 6 I 44. 7I 22. 8 VII 146, por ejemplo. 9VII 70, VII 4, X 387, 388, 408, 409. 10 IV 116, 117.[Correspondencia a Mesland del 2 de mayo de 1644, en: Descartes, René, Obras escogidas, traducción de Ezequiel de Olaso y Tomás Zwanck, selección, prólogo y notas de Ezequiel de Olaso, Buenos Aires: Sudamericana, 1967, p. 424.N. de las T.] 11 VII 25, X 515, 516.Cf.Montaigne: Essais, libro 3, capítulo 13. 12 Pr.III 4. nuevo orden, estamos ante el peligro de la regresión o progresión al infinito 13 .Aunque claro, la muerte puede sorprenderme en cualquier momento 14 .La idea de la muerte y la idea del olvido son la doble forma en la que se afirma la idea de la independencia de los momentos del tiempo.De manera general, el desarrollo es signo de imperfección y el hecho mismo de que una cosa o cualidad aumente /4/ en grados es testimonio irrefutable de su carácter imperfecto 15 .Así, las "antiguas ciudades que al principio solo fueron aldeas y se han convertido con el paso del tiempo en grandes ciudades, están tan mal proporcionadas en comparación con esas plazas regulares que un ingeniero diseña según su fantasía en un llanura".El ideal sería, entonces, encontrar "desde el comienzo una regla de vida perfecta, hacer un uso pleno de nuestra razón desde el momento de nuestro nacimiento" 16 .Ideal que no podemos alcanzar, porque si lo alcanzáramos seríamos Dios.Al menos podemos intentar imitar, dentro de una medida falible, el conocimiento divino.Si lo queremos, no nos será necesario seguramente quedarnos encerrados en la consideración de los cuerpos y de la naturaleza, porque los cuerpos cambian incesantemente.Si decimos que nuestro cuerpo es el mismo que el de nuestra infancia 17 , si decimos que el trozo de cera es el mismo a toda hora, esto quiere decir antes que nada que nuestro cuerpo de la infancia y nuestro cuerpo de ahora están unidos a la misma alma, que tenemos un concepto de la cera que se mantiene idéntico.Un mínimo de certeza nos será suficiente para reconstruir toda certeza, así como un mínimo de duda fue suficiente para destruir toda certeza.De lo que se trata, lo hemos dicho, es de encontrar una certeza instantánea, una verdad que encierre su certeza, que sea esencialmente diferente de un razonamiento 13 Sobre la regresión al infinito, que siempre se debe evitar, VII 18, 106, 107, 111, 422, X 122, IV 112, 113, V 355-VII 42, 50. 1II 552.Descartes vuelve varias veces sobre esta idea de la brevedad de la vida, por ejemplo en VI 3. 15 VII 47. 16 VI 13. [

Referência(s)