Artigo Revisado por pares

Situación actual del manejo de la hemorragia digestiva alta no varicosa en España

2012; Elsevier BV; Volume: 35; Issue: 7 Linguagem: Inglês

10.1016/j.gastrohep.2012.02.007

ISSN

1578-9519

Autores

Ángeles Pérez Aísa, Javier Nuevo, Anibal Alejandro López Morante, Ángel González Galilea, Carlos Martín de Argila, D. Aviñoa Arreal, Faust Feu, Fernando Borda Celaya, Javier P. Gisbert, Francisco Pérez Roldán, José Manuel Gonzalvo Sorribes, José María Palazón Azorín, Marta Ponce Romero, Manuel Castro‐Fernández, M.V. Catalina Rodríguez, Sonia Gallego Montañés, Xavier Calvet, Luı́s Rodrigo, Miguel Montoro, Yanira González Méndez, Ángel Sierra Hernández, Eloy Sánchez, Enrique David Luzuriaga Muñoz, Enrique Pérez-Cuadrado, M. Muñoz, Ángel Lanas,

Tópico(s)

Gastrointestinal disorders and treatments

Resumo

La mortalidad en la hemorragia digestiva alta no varicosa (HDA-NV) no ha variado. Se necesita conocer más información para mejorar las estrategias de tratamiento. Los objetivos de este estudio fueron: a) describir el perfil de presentación de los episodios de HDA-NV; b) el manejo clínico según práctica clínica habitual, y c) establecer cuáles son los resultados clínicos asociados a los tratamientos endoscópicos y médicos en España. ENERGIB fue un estudio retrospectivo de cohortes que recogió información del manejo y forma de presentación de HDA-NV en Europa. Presentamos los datos relativos a España. Los pacientes se trataron según la práctica clínica habitual. Para las variables cuantitativas se calculó la media y la desviación estándar y para las categóricas se calcularon frecuencias absolutas y relativas. Los pacientes (n = 403) fueron hombres (71%), con edad media 65 años, asociaron comorbilidad (62,5%). Los equipos encargados de su manejo fueron gastroenterólogos (57,1%) o médicos internistas (25,1%). Los inhibidores de la bomba de protones se usaron de forma empírica preendoscopia en un 80% de los casos. El 6,4% presentó persistencia y el 6,7% resangrado después de la endoscopia. La tasa de mortalidad en los 30 días posteriores fue del 3,5%. Este estudio permite conocer el perfil de presentación de los episodios de HDA-NV en España y el manejo en práctica clínica habitual. Este se ajusta a los estándares propuestos por las recientes guías de práctica clínica. Entre otros datos destaca que los pacientes con hemorragia son cada vez de edad más avanzada y presentan un mayor número de enfermedades asociadas, lo que podría explicar que la mortalidad se haya mantenido estable a pesar de los evidentes avances en el manejo de esta entidad. Mortality related to nonvariceal upper gastrointestinal bleeding (NVUGIB) has not changed. More information is needed to improve the management of this entity. The aims of this study were: a) to determine the characteristics of bleeding episodes, b) to describe the clinical approaches routinely used in NVUGIB, and c) to identify adverse outcomes related to endoscopic or medical treatments in Spain. The European survey of nonvariceal upper GI bleeding (ENERGiB) was an observational, retrospective cohort study on NVUGIB with endoscopic evaluation carried out across Europe. The present study focused on Spanish patients in the ENERGiB study. The patients were managed according to routine care. The mean and standard deviation were calculated for quantitative variables and absolute and relative frequencies were calculated for categorical variables. Patients (n=403) were mostly men (71%), with a mean age of 65 years, and co-morbidities (62.5%). Most of the patients were managed by gastroenterologists (57.1%) or internal medicine teams (25.1%). A proton pump inhibitor was used empirically in 80% before endoscopy. Bleeding persistence occurred in 6.4% and recurrence in 6.7%. The mortality rate at 30 days was 3.5%. This study contributes to the characterization of Spanish patients and NVUGIB episodes in a real clinical setting and identifies the routine management of this entity, which is in line with the standards proposed by recent clinical practice guidelines. A notable finding was that age and the number of comorbidities in NVUGIB patients were increasing. These factors could explain the persistent mortality rate, despite the evident advances in the management of this entity.

Referência(s)