Portal de Periódicos da CAPES

La escuela ante el reto del saber práctico

1998; Taylor & Francis; Volume: 21; Issue: 82 Linguagem: Espanhol

10.1174/021037098320784871

1578-4126

Victòria Camps,

Ethics and bioethics in healthcare

La distancia entre la teoria y la practica, entre el deber ser y el ser, entre la predica y la accion es, tal vez, el problema basico de la etica. ?De que sirven los discursos, los argumentos, las fundamentaciones, las teorias, si seguimos actuando mal? Hablamos de virtud cuando lo que deberia preocuparnos es ser virtuosos —se reprochaba a si mismo Aristoteles en la Etica a Nicomaco—. La inutilidad de la contemplacion con respecto a la accion fue una obsesion del filosofo griego. No podia ser de otra forma si queria atenerse a la tesis de que la virtud es conocimiento, caracteristica de la filosofia moral griega. Conocer el bien es practicarlo, afirmaban, con una conviccion resistente a los continuos desmentidos que proporcionaba la practica. Solo Aristoteles, el mas realista de todos ellos, se sintio obligado a explicarlo echando mano de una idea que luego harian suya San Pablo y mas de un filosofo moderno: la voluntad es debil, conoce el bien, pero hace el mal. Unos siglos mas tarde, Petrarca recordaba al estagirita y se sumaba a su lamento: “He leido —salvo error— todos los libros morales de Aristoteles, me han explicado tambien varios y, hasta que salio a relucir esta enorme ignorancia mia, algo creia haber entendido. Con ellos, tal o cual vez me he vuelto quiza mas docto, pero no mejor, segun debiera; y con frecuencia he lamentado ante mi, y ocasionalmente en publico, que no se cumpliera lo anunciado por el propio filosofo en el libro primero de la Etica: esa parte de la filosofia se ensena no porque ampliemos nuestros aber, sino porque seamos buenos”. Y es que, aparte del reconocimiento de que la voluntad es debil, quiza el discurso teorico y especulativo sea insuficiente para mover a la accion. En las ensenanzas de Aristoteles —sigue Petrarca— hay doctrina, sin duda, pero no “acicate” para la virtud, pues “una cosa es saber y otra amar, una cosa entender y otra querer”. Observacion importante que luego hemos de retomar: ?como se ensenan los valores? ?como se educa? Una cosa es la etica docens y otra la etica utens, la “moral vivida” —recordaba Aranguren—: la importante es la segunda, aunque no sea en absoluto obviable la primera.