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La cambiante epidemiología del tabaquismo: Barcelona, 2000-2001

2004; Elsevier BV; Volume: 204; Issue: 6 Linguagem: Espanhol

10.1016/s0014-2565(04)71468-x

1578-1860

Joan R. Villalbí, Z. Tomás, María José López, María Guadalupe Peña Rodríguez, Manel Nebot,

Smoking Behavior and Cessation

En los últimos años se han producido diversas iniciativas de prevención y cambios sociales que deberían tener un impacto en la epidemiología del tabaquismo en nuestro medio. Sin embargo, su efecto real es poco conocido debido a cambios metodológicos en las encuestas poblacionales existentes. En este trabajo se analizan los datos sobre tabaquismo de la encuesta de salud de la ciudad de Barcelona obtenidos en la última ronda (ESBA 2000-2001), con referencia a la información acumulada en 18 años desde su inicio en 1983. La ESBA 2000-2001 es una encuesta de salud por entrevista realizada sobre una muestra ponderada de 10.030 personas. Se presentan los datos relativos al consumo de tabaco para las personas de 15 y más años de edad incluidas en la encuesta, estratificando por edad, sexo y clase. Se presentan también variables de contexto del consumo y se analiza el abandono del tabaco entre las personas que han fumado. La proporción de fumadores diarios en la población mayor de 14 años es de 29%, mientras que la de ex fumadores es de 21% y hay un 2,2% de fumadores ocasionales. La prevalencia es máxima en el grupo de 35 a 44 años, para reducirse drásticamente después. El análisis estratificado por edad, sexo y categoría ocupacional muestra interesantes diferencias entre los fumadores diarios. Entre los varones se aprecia un claro gradiente según categoría ocupacional. Entre las mujeres la situación es más compleja. El fumador típico se inició a los 17 años y consume ahora 16 cigarrillos diarios. El consumo es algo mayor para los varones y máximo en el grupo de 35-44 años. Dos tercios de los fumadores (65,7%) dicen querer dejar de fumar, y más de un tercio (36%) lo ha intentado el último año. Casi la mitad (48,1%) han recibido de su médico el consejo de dejarlo. A uno de cada cuatro (24,9%) le han pedido que deje de fumar en algún lugar. Casi la mitad viven sin otros fumadores en casa y apenas un tercio trabajan sin estar en contacto con otros fumadores. La proporción de abandonos crece con la edad en ambos sexos, y hoy apenas hay diferencias en la probabilidad de dejar de fumar cuando los datos se estratifican por grupos de edad. Estos resultados muestran el cambiante patrón de la epidemiología tabáquica en Barcelona: fumar ya no es la conducta mayoritaria en ningún grupo de edad y sexo, y el único grupo social en el que fuma más de la mitad de sus miembros son los trabajadores varones no cualificados entre los 25 y 44 años de edad. Esta situación se ha producido a expensas de dos procesos: una importante proporción de abandonos precoces, visible ya en los adultos jóvenes, y un inicio del hábito menor. No se aprecian diferencias reales entre géneros en cuanto a la probabilidad de dejar de fumar. Estos datos corrigen recientes estimaciones que podían estar influidas por cambios metodológicos en los instrumentos utilizados. In recent years various initiatives of prevention and social changes have been carried out that should have an effect on epidemiology of smoking in our area. Their real effect is little known, however, because of methodological changes in the existing population surveys. In this work the data on smoking in the last city of Barcelona health survey (ESBA 2000-01) are analyzed, with reference to the cumulative information obtained along 18 years from the first survey in 1983. ESBA 2000-01 is an interview health survey carried out on a weighted sample with 10,030 people. Data relative to tobacco use are showed for people 15-year-old or older included in the survey, stratifyed by age, sex, and class. Consumption context variables are also showed, and the tobacco consumption quitting among people who have smoked is analyzed. The proportion of daily smokers in the population over 14 years of age is 29 %, while that of former smokers is 21 % and 2.2 % in this population are occasional smokers. The prevalence is maximum in the 35-44 year-old group, and the prevalence is reduced drastically after this age. Stratified analysis by age, sex, and occupational category shows interesting differences among daily smokers. A strong gradient is observed according to occupational category in males. The situation is more complex in women. The typical smoker began when 17-year-old, and now consumes 16 cigarettes a day. Consumption is somewhat higher in males and is maximum in the 35-44-year-old group. Two-third of the smokers (65.7 %) want to quit smoking and more than one third (36 %) has attempted it along the last year. Almost half of somokers (48.1 %) have received advice to quit smoking from their physician. One of every four (24.9 %) smokers has been warned for smoking in some places. Almost half smokers are the only smoker in their home, and barely a third are the only smokers at work. The proportion of quitting increases with age in both sexes, and nowadays the differences in the probability of quitting smoking are few when the data are stratified by age groups. These results show the changing pattern of tobacco epidemiology in Barcelona: smoking is no longer the main behavior in no age and sex group, and the only social group in which more than half of its members smoke are 25-44 year-old not qualified worker males. This situation has occured because of two processes: an important proportion of early quitting (demonstrated even in young adults) and a decrease in the beginning of the habit. Real differences are not observed between males and females with regard to the probability of quitting smoking. These data correct recent estimates that could be influenced by methodological changes in the instruments used.