La apendicitis y su historia
2014; Q16635223; Volume: 142; Issue: 7 Linguagem: Espanhol
10.4067/s0034-98872014000700020
ISSN0717-6163
AutoresJaime Cerda, Cristóbal Maíz H,
Tópico(s)Medical History and Innovations
ResumoSr. Editor: Con gran interes hemos leido el excelente articulo “La apendicitis y su historia”, escrito por el Dr. Pablo Young (1). La resena, muy bien documentada, ofrece un ameno recorrido por la historia de la apendicitis aguda, patologia rica en elementos semiologicos, personajes y anecdotas. En un afan constructivo, quisieramos complementar el relato del Dr. Young refiriendonos a un hito que tambien forma parte de la historia de esta patologia: la primera auto?apendicectomia realizada en condiciones extremas. El hecho ocurrio en 1961 y su protagonista fue Leonid Rogozov (1934?2000), cirujano de 27 anos oriundo de Leningrado e integrante de la VI Expedicion Antartica Sovietica, comisionada para establecer en dicho territorio la base Novolazarevskaya. Medico unico en territorio hostil, el dia 29 de abril Rogozov presento los sintomas caracteristicos de la enfermedad, diagnosticandose un cuadro altamente probable de apendicitis aguda. Inicio tratamiento conservador (antibioticos, frio local). Sin embargo, su condicion empeoro progresivamente. Rogozov, sin posibilidad de recibir ayuda externa, tomo la decision de realizar una auto?apendicectomia. Para tales efectos, instruyo a sus companeros de expedicion para improvisar un pabellon y esterilizar el material quirurgico ad hoc. Tres de ellos cumplieron roles claves: el meteorologo Alexandr Artemev (quien desempeno el rol de arsenalero), el mecanico Zinovy Teplinsky (encargado de sujetar un espejo y ajustar la luz) y el director de la base Vladislav Gerbovich (quien quedo “de reserva”, en caso que las nauseas impidieran a los dos anteriores desempenar sus funciones). En la madrugada del 1 de mayo Rogozov comenzo el procedimiento quirurgico, a mano desnuda, con el fin de preservar su sentido del tacto para guiarse. Utilizo anestesia local con procaina y procedio a realizar una incision de 10 a 12 cm. La auto?apendicectomia duro 1 hora y 45 minutos, durante los cuales Rogozov tuvo que tomar pequenos descansos, producto de su debilidad general y vertigo. Los hallazgos de la laparotomia demostraron un apendice con cambios inflamatorios, sin peritonitis. Removido el apendice, aplico antibioticos en la cavidad peritoneal y cerro la herida. Evoluciono favorablemente, regresando dos semanas despues a sus labores habituales en la base antartica y poco mas de un ano despues retorno a su patria. Los detalles de esta singular operacion fueron reportados en 2009 por el Dr. Vladislav Rogozov, hijo del protagonista de esta hazana. Su relato incluye fragmentos del diario de vida del cirujano/paciente y un notable registro fotografico del momento (2). Leer mas
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