El “Pozo de la Salud”, referencia balnearia en las Islas Canarias
2014; Sociedad Española de Hidrología Médica; Volume: 29; Issue: 2 Linguagem: Espanhol
10.23853/bsehm.2017.0353
ISSN0214-2813
AutoresBC Rodríguez-de Vera, M Padron, JF Jimenez-Diaz, C Jiménez-Rodriguez, Y Hernandez-Martinez,
Tópico(s)Historical and socio-economic studies of Spain and related regions
ResumoEn la isla canaria de El Hierro se encuentra el balneario conocido bajo la denominacion de “Pozo de la Salud”, con mas de trescientos anos de antiguedad, aunque inicialmente se nomino como “Pozo de Sabinosa”, en alusion al pago herreno donde se ubica. Fue mandado construir en 1702 por D. Juan Bautista Herrera Ponte Ayala y Rojas, VIII Conde de La Gomera, Senor de El Hierro y III Marques de Adeje. Inicialmente se considera inservible por ser el agua mas salobre de las alumbradas en la isla. Sin embargo, a principios del siglo XIX, el poligrafo canario Jose de Viera y Clavijo es el primer autor que acuna el termino de sulfureas como apelativo para esta agua termal, y ademas de confirmar que es curativa para enfermedades cutaneas, pone de manifiesto su actividad como aguas purgantes y aperitivas. En el primer tercio del siglo XIX, el presbitero herreno Leandro Casanas Frias, tuvo gran interes en mejorar el aspecto del Pozo de Sabinosa, construyendo varios cuartos en el lugar para servir de habitacion a los banistas. Por ello se le atribuyo, erroneamente, por muchos autores la construccion del Pozo en el ano 1830. Unos anos mas tarde aparece la figura del patricio grancanario Agustin del Castillo y Bethencourt, IV Conde de la Vega Grande de Guadalupe, que como consecuencia de su visita al Pozo con el fin de curarse una afeccion cutanea, inicia el proceso de mejora de las instalaciones, incitando a las autoridades locales para el acondicionamiento y reconocimiento del enclave. Prueba de ello es que en 1843 remite una muestra de las aguas del Pozo de Sabinosa a Paris para su analisis por parte del celebre profesor, oriundo de Menorca, Mateo Orfila, decano de la facultad de Medicina de la Universidad de Paris en aquel tiempo. Simultaneamente, en este ano de 1843, se realiza otro analisis quimico cuantitativo de las aguas del Pozo de Sabinosa en Canarias, a manos del farmaceutico Santiago Gonzalez Serrano. Gracias a esta analitica, el medico Bartolome Saurin y Celis declara las aguas como mineromedicinales, publicandose dicho dictamen en el Boletin Oficial de Canarias en mayo de 1843. De este modo se convierten en las primeras aguas declaradas mineromedicinales en el archipielago canario. Posteriormente, el Boletin Oficial del Estado las declara de Utilidad Publica en 1949, correspondientes a la clase de cloruradas sodicas. A lo largo de todo el siglo XIX y XX se aprovecho su beneficio salutifero mediante la explotacion por casas de banos particulares. En los anos ochenta de la pasada centuria se construye el nuevo Balneario del Pozo de la Salud sobre las ruinas del anterior balneario, pero por diversas circunstancias no pudo ponerse en funcionamientos hasta 1995. El Balneario del Pozo de la Salud es el unico referente activo existente en las Islas Canarias en la actualidad.
Referência(s)