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Tríptico de la existencia

2019; University of Northern Colorado; Volume: 35; Issue: 1 Linguagem: Espanhol

10.1353/cnf.2019.0046

2328-6962

Carmen María López López,

Spanish Culture and Identity

Tríptico de la existencia Carmen María López Antiguo huésped Igual que en un desfile de los días sinnombre así la heridaingrávida reposa en el alféizar del mundo.No hay tragedia ni labios que la enturbien,ni soles que la vivan ni muertes que la horaden.La herida, ese cuchillo en desencantoquiebra la luz, de súbito ensombrece.En noches sin amor se nos repliegaen el costado izquierdo de la viday se duele habitada en carne propia.No es una bendición pero no importa:junto a nosotros yace en nuestrolecho,respira a nuestro lado sin voluntad deasombro.En las sábanas frías del inviernose enreda en nuestra carney nos cierra los párpados.Como un huésped perpetuo,regresa cada noche, hospitalaria, a escarbarla tierra del dolor o el dolor mismo.Hace surcos sin tregua en la hondonadadel corazón más triste y desvalido.Otras veces fulgura intermitenteen sempiterna espera y no nos dañasino en frágiles golpes de estertor.Parece traer la calma y es tormentala lluvia derramada en su regreso. [End Page 186] Herida viva, amiga de un rescoldo,antiguo huésped de visita innoble.La herida cotidiana, siempre igual a sí misma,con su dolor a cuestascon su miseria breve. Heridicidio Hay heridas que esconden en sus bordesla lentitud del tiempo.Hay un pájaro dentro de mislabios. Me aprisiona la boca, medomina los nervios de la lengua,las encías obscenas de mis noches,la saliva ferviente del semen o el olvido,las fauces de mis dientesque fueron mordedura sangrienta en otracarne, vísceras del amor que nunca tuve o quetuvey se enjauló en mi boca como el pájáro,ave febril de todos mis desastres. Hubo un tiempo en que todo era hermoso y las cancionesofrendaban un coro en plena luz,un tiempo en que el amor batía alasen que amantes formaban con sus cuerposbellas cartografías.Un tiempo sin los clavos de la cruzy sin la cruz del tiempo. Entonces en mi voz una plegariaaliviaba la herida: heridicidio.Y las cuerdas vocales de mi vozen concordia vivían con mi alma. Hubo un tiempo dichoso. Imaginad:la hierba recortada acariciandoepidermis la noche inaugural de dosamantes,dos labios aún ajenos. [End Page 187] Apenas sin saberlo se hizo el fango,habitamos la grieta de estar vivos ycon ella el dolor fundacionalde ningún paraíso.Acaso la alegría solo seadestilación del llanto,gotas de agua en la fluvial esperade ninguna esperanza. Hay heridas que graban en sus bordesuna pequeña muerte.Muerte de los que se quedan, más muertosaún que los idos.Hay heridas de las que no sabemosnada.Nada sabemos sino el dolor antiguo del que nadiehabla.Insondable dolor de precipicio. Hubo un tiempo de pájaros en trino,de jardín con delicias, de abundanciaen la tierra. Y lo perdimos.Irremisiblemente, lo hubo y lo perdimos. Todas esas tijeras de mi vida Qué misterio circunda el universopara que un individuo esté vivoy al instante esté muerto.Qué misterio: estar dentro del vientre y luego fuera,durante unos añosa los que no sé qué periodología biológicaha denominado vida;estar dentro,en la oquedad esencial y salir fuera,ser expulsado a la vida,para volver simétricamente y haciendojusticia a la ley de la existencia,a otro hueco más hondo: el de la muerte. [End Page 188] Útero y ataúd son una mismaoquedaden dos edades distintas. Prólogo y epílogo.Placenta y carne inerte.Cordón umbilical e hilos que cortan las Parcas.En dos tijeretazos venimos y nos vamos.La matrona nos separa de la madre: vivimos.Las Parcas nos desprenden de la vida: morimos.Qué importantes son las tijeras para queprosiga el curso del universo.Dos láminas de hierro, dos lingotesde acero entrecruzados,y el mundo se detiene. Desde ahora mirar...