Artigo Acesso aberto Revisado por pares

Inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina y bloqueadores de los receptores de angiotensina II: ¿aumentan el riesgo de padecer COVID-19?

2020; Elsevier BV; Volume: 27; Issue: 3 Linguagem: Espanhol

10.1016/j.rccar.2020.05.003

ISSN

2357-3260

Autores

Dora I. Molina, Tania Marcela Muñoz, Katterine Guevara,

Tópico(s)

SARS-CoV-2 and COVID-19 Research

Resumo

Resumen Un nuevo coronavirus, llamado coronavirus 2 del síndrome respiratorio agudo severo (SARS-CoV-2), se descubrió en diciembre de 2019 en Wuhan, China; el virus se intensificó rápidamente y el 11 de marzo de 2020 la Organización Mundial de la Salud lo declaró pandemia.Los datos emergentes sugieren que los pacientes mayores con COVID-19 asociado a otras afecciones comórbidas, como diabetes, hipertensión, y enfermedades cardíacas y pulmonares, son, en particular, más susceptibles, en comparación con las poblaciones generales y tienen mayor mortalidad.Aún no está claro si esta mayor asociación de hipertensión arterial con COVID-19 y el mayor riesgo de mortalidad están directamente relacionados con la hipertensión arterial u otras comorbilidades asociadas, o con el tratamiento antihipertensivo.Si bien el mecanismo patogénico subyacente que une la hipertensión y la gravedad de la infección por COVID-19 aún no se ha dilucidado, se ha planteado la hipótesis de que la activación excesiva del sistema renina-angiotensina (RAS) podría contribuir a la progresión de la lesión pulmonar relacionada con COVID-19.La preocupación sobre si los bloqueadores del receptor de angiotensina II (BRA) y los inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (IECA) pueden tener efectos nocivos sobre la morbilidad y la mortalidad de los pacientes con COVID-19 se basa en la especulación de que estos medicamentos aumentarían la regulación de la enzima convertidora de angiotensina II (ACE2), un receptor para el SARS-CoV-2, que aumentaría la carga viral y la lesión pulmonar.Los estudios recientes concuerdan con las recomendaciones de las sociedades científicas que plantean evitar la suspensión o cambio de medicación antihipertensiva, pues no hay evidencia que muestre que estos puedan ser tomados como factores de riesgo para gravedad o mortalidad por COVID-19.

Referência(s)