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Hongrie. L'aménagement du territoire réduira-t-il les déséquilibres régionaux ?

1980; Volume: 8; Issue: 1 Linguagem: Espanhol

10.3406/aru.1980.999

2497-7098

Michel Amiot,

Urbanization and City Planning

Hungría. La organización del territorio disminuirá los desequilibrios regionales ? (Michel Amiot, p. 87-123) La primera fase de la industrialización y de la reconstrucción después de 1945, en el plano de los equilibrios interregionales, tuvo efectos negativos porque se agravaron las desigualdades regionales entre el noroeste del país y la capital, por un lado, y el sur y el este por el otro lado. La industrialización intensiva que conoce el pens desde los años 60 se acompaña de una selección de las ramas a desarrollar, de sus implantaciones, y de la elaboración de un plan de conjunto de organización del territorio y de equipamiento urbano. La combinación de estas políticas con la de la habitación produjo varios efectos en la población del país que se pueden resumir en : ¿ un país industrializado en el que la mitad de la población vive en la campaña ?. El artículo pasa en revista las instituciones que contribuyen a la puesta en obra de la política de organización del territorio y describe las funciones del V ATI, instituto donde se labora la planificación espacial, nacional y regional. Es asombroso constatar la existencia de ciertas homologías. Como en los países capitalistas, la organización del territorio en Hungría es una preocupación de segundo orden. Las autoridades recurrieron a ella después dé haber tomado conciencia de los desequilibrios involuntarios engendrados por la industrialización acelerada. La preocupación de la ¿ planificación regional ?, teniendo cuidado de integrar la previsión de los efectos espaciales del desarrollo económico en las previsiones económicas mismas, es una preocupación relativamente reciente y a propósito de la cual no hay que alimentar muchas ilusiones. Todo pasa, en efecto, como si encontráramos en el régimen socialista las mismas diferencias que golpean tanto al observador de los países capitalistas, entre los deseos del experto organizador y las decisiones tomadas efectivamente por los agentes económicas, políticos o administrativos. Los objetivos expresados por el experto-organizador toman en serio, de una manera ingenua, la contabilidad que el hombre político preconiza a titulo de ideal entre todos los objectivas que pretende obtener : desarrollo equilibrado de todas las fuerzas de la sociedad y de todas las partes del territorio, supresión gradual de la desigualdad de la condición de los habitantes de la ciudad y de los de la campaña, de los trabajadores manuales y de los trabajadores intelectales, etc.