A Simple Vista en Este Número
2018; Elsevier BV; Volume: 125; Issue: 4 Linguagem: Espanhol
10.1016/j.ophtha.2018.01.040
ISSN1549-4713
Autores Tópico(s)Glaucoma and retinal disorders
ResumoFuller y otros (p. 476) analizaron datos de una encuesta de corte transversal a nivel nacional para examinar la relación entre limitaciones sensoriales y dificultades cognoscitivas y funcionales. Encontraron que la prevalencia de serias limitaciones visuales (SVI) reportadas por los mismos pacientes calculada a nivel nacional es de 2,8%, las limitaciones auditivas graves (SHI) es de 6% y las limitaciones sensoriales duales graves (DSI) es de 1,6% entre 7.210.535 individuos de 45 años o más de la Muestra de Microdatos de Uso Público DSI sobre la Encuesta Comunitaria Americana de 5 años de 2011 a 2015. La DSI grave se asoció con nivel de dificultades cognoscitivas, de vida independiente, de autocuidado y de ambulación que la SVI o la SHI consideradas individualmente y que la SVI considerada individualmente se asoció con mayores dificultades de que la SHI considerada también individualmente. Cualquier discapacidad sensorial se asoció con mayores dificultades cognoscitivas y funcionales que en los casos sin limitación sensorial. Los investigadores también encontraron y concluyeron que la prevalencia de graves discapacidades sensoriales aumenta con la edad y se distribuye de forma desigual entre los distintos grupos raciales/étnicos. Kazemian y otros (p. 569) utilizaron una técnica estadística conocida como filtrado de Kalman para desarrollar una herramienta predictiva capaz de generar un menú actualizado, personalizado y dinámico de los niveles de presión intraocular objetivo (IOP) para pacientes con glaucoma de ángulo abierto (OAG). Los investigadores analizaron 571 ojos de 571 participantes con OAG moderado o avanzado de OAG del Collaborative Initial Glaucoma Treatment Study (CIGTS) (Estudio Inicial Colaborativo del Tratamiento de Glaucoma) o del Advanced Glaucoma Intervention Study (AGIS) (Estudio Intervencionista de Glaucoma Avanzado). Su modelo predijo que los que progresaban rápidamente perderían 2,1, 6,7, y 11,2 dB de desviación media (MD) y los que progresaban lentamente perderían 0,8, 2,1, y 4,1 dB MD por debajo de las IOPs objetivo de 6, 15, y 24 mmHg en el curso de 5 años. No hubo diferencias estadísticamente significativas durante los cinco años entre la progresión de pacientes negros versus blancos, hombres versus mujeres y los participantes en CIGTS versus AGIS bajo distintos objetivos de IOPs. Los investigadores sugieren que sus hallazgos destacan la importancia de reconocer y tratar agresivamente a los pacientes con OAG en quienes el glaucoma progresa rápidamente y concluyen que su herramienta predictiva puede ayudar a los clínicos a determinar una IOP objetivo personalizada para pacientes con OAG. Price y otros (p. 505) realizaron un estudio aleatorio prospectivo para investigar si la frecuencia de dosificación de riboflavina afecta la eficacia del enlace cruzado de la córnea (CXL) o su seguridad. El estudio incluyó 510 pacientes con queratocono progresivo o ectasia postcirugía refractiva. Se asignó en forma aleatoria un ojo de cada paciente a recibir dosificación de riboflavina a intervalos de 2 minutos o de 5 minutos con CXL estándar. Los investigadores encontraron que los dos regímenes de dosificación de riboflavina producían una reducción equivalente en los valores máximos de queratometría desde la determinación de la línea de base hasta 6 meses después del CXL. Ambos regímenes de dosificación resultaron también en una mejoría en la media de corrección de la agudeza visual a distancia (CDVA) y la agudeza visual no corregida a distancia (UDVA) a 6 meses, con una baja tasa global de complicaciones. Con ambos intervalos de dosificación, la mejoría media de la CDVA fue de 0,07 logaritmos del ángulo mínimo de resolución a 6 meses, y de los 635 ojos estudiados y ojos contralaterales examinados, 134 ganaron y 32 perdieron 2 o más líneas de CDVA. Los investigadores concluyeron que los regímenes de dosificación de riboflavina de 2 minutos y 5 minutos mostraron una eficacia equivalente con el tratamiento estándar de CXL. Papudesu y otros (p. 512) evaluaron el impacto de la limitación de la agudeza visual, la degeneración macular relacionada con la edad (AMD) y la historia de cirugía de cataratas en la mortalidad. Analizaron datos de 4.203 participantes entre los 50 y 80 años de edad, con AMD al menos intermedia, inscritos entre 2006 y 2008 en un estudio clínico aleatorio de suplementos nutricionales, el Estudio 2 de Enfermedad Ocular Relacionada con la Edad (AREDS2) para el tratamiento de la AMD y las cataratas. Un total de 368 personas de la población del estudio AREDS2 murió durante el seguimiento, y los investigadores encontraron una asociación del incremento de la mortalidad en quienes presentaban una AMD más severa o entre quienes tenían formas tardías de AMD, AMD neovascular o atrofia geográfica. Además, las tasa más altas de mortalidad se asociaron con cirugía bilateral de cataratas y una agudeza visual mejor corregida de menos de 20/40. Los participantes que recibieron terapias anti-VEGF mostraron un riesgo de mortalidad más bajo, y las modificaciones en el tratamiento de suplementos nutricionales del AREDS no mostraron un efecto estadísticamente significativo sobre la mortalidad. Los investigadores concluyen que la AMD tardía, la limitación visual y la cirugía de cataratas se asocian con disminución de la sobrevida en el estudio AREDS2. Thariat y otros (p. 606) realizaron un estudio retrospectivo para evaluar las características clínicas y los resultados de la terapia de protones para el manejo del melanoma del iris. El estudio incluyó 107 pacientes de tres centros oftalmológicos tratados con terapia de haz de protones para melanoma del iris entre 1996 y 2015. A 5 años, la incidencia cumulativa de recidiva fue de 7,5%. Cinco pacientes tuvieron una recidiva local, y la media del tiempo hasta la recidiva local fue de 36,3 meses. Tres pacientes recibieron tratamiento adicional de terapia de protones mientras que los otros dos pacientes fueron sometidos a enucleación secundaria. Ninguno de los pacientes tuvo metástasis ni murió por melanoma de iris. La visión mejoró o permaneció estable en 60 de estos pacientes, pero la media de la agudeza visual mejor corregida fue levemente inferior a la de la línea de base. Treinta y uno de los 54 pacientes desarrollaron cataratas, ninguno de ellos tenía cataratas ni implante al momento del diagnóstico y se informó glaucoma secundario en 8 pacientes. Todos los casos que presentaron complicaciones, a excepción de cinco, fueron leves, transitorios y sin limitaciones visuales después del tratamiento. Los investigadores concluyen que la terapia de protones es una técnica segura y eficiente para el tratamiento del melanoma del iris. This Issue at a GlanceOphthalmologyVol. 125Issue 4PreviewFuller et al ( p. 476 ) analyzed data from a nationwide cross-sectional survey to examine the relationship between sensory impairments and cognitive and functional difficulties. They found that the estimated nationwide prevalence of self-reported serious vision impairment (SVI) is 2.8%, serious hearing impairment (SHI) is 6%, and serious dual sensory impairment (DSI) is 1.6% among 7 210 535 individuals aged 45 or older from the 5-year American Community Survey 2011–2015 Public Use Microdata Sample. Full-Text PDF
Referência(s)