El Franquismo se fue de fiesta. Ritos festivos y cultura popular durante la dictadura ed. by Claudio Hernández Burgos y César Rina Simón (review)
2024; University of Northern Colorado; Volume: 39; Issue: 2 Linguagem: Espanhol
10.1353/cnf.2024.a926001
ISSN2328-6962
Autores Tópico(s)Media, Journalism, and Communication History
ResumoReviewed by: El Franquismo se fue de fiesta. Ritos festivos y cultura popular durante la dictadura ed. by Claudio Hernández Burgos y César Rina Simón José Marchena-Domínguez Hernández Burgos, Claudio y César Rina Simón, Eds. El Franquismo se fue de fiesta. Ritos festivos y cultura popular durante la dictadura. Valencia: Publicaciones de la Universitat, 2022. 236 pp. ISBN: 978-841118-003-0. En algunas ocasiones, cuando se pretende construir una historia pensando en los hechos más trascendentales hacia un relato veraz y científicamente respaldado, tendemos al error de pretender como importantes y únicos, los sucesos políticos y socioeconómicos. Frente a ello, historiadores del calado de George Duby o Michelle Vovelle, apostaron por defender otros aspectos que no dejan de ser capitales para una reflexión profunda del hecho histórico. Se referían a los perfiles culturales y mentales que, terminan por marcar una impronta en las sociedades y en sus mecanismos de acción. Reciente fue la inserción de otras disciplinas que, como la antropología, la etnología o la sociología, auxiliaron en esta labor de ensamblaje de la cultura social al global de la historia. Así, entendemos a las fiestas como fundamentales -parafraseamos-, para los imaginarios de cada comunidad, ya que escenifican, en tiempo y espacio, desde lo simbólico y expresivo, el orden social, las creencias y la identidad del grupo. Editado por la Universitat de Valéncia en la colección "Història I Memória del Franquisme", Sello de Calidad (CEA-APQ), los profesores Claudio Hernández Burgos y César Rina Simón, aportan una interesante propuesta sociocultural sobre la gestión de la dictadura franquista hacia las fiestas y la cultura popular. Diez capítulos que tiene por objeto describir algunas de las celebraciones más representativas de nuestro país y, cómo, el franquismo adaptó sus perfiles básicos a la obtención de un producto compatible y exaltador con el régimen político. Mientras media España huía del país, era represaliada, fusilada o encerrada en campos de concentración, la otra media era alienada por los valores folkloristas de la copla española y el flamenco, la Lidia y el impacto del cine, la radio y el balompié. Y como no, las fiestas, eran adobadas al control y la censura, mientras sus protagonistas creían vivirla con entera libertad. [End Page 169] El profesor Hernández i Martí, aborda las Fallas en el contexto franquista. Resalta cómo Valencia se fue universalizando en el escenario fallero entre 1911 y 1936, recuperándose en la posguerra sobre una censura temática y potenciando la exaltación folklórica y religiosa, como la ofrenda floral a la virgen de los Desamparados. Una tipificación de la fiesta, como el escritor Hemingway hace de los Sanfermines de Pamplona. Francisco Javier Caspitegui entrecruza, junto a los valores folklóricos y nacionales -el toro español-, la mirada del premio Nobel que hizo "apropiación" y promoción desde su literatura. Otra de las grandes festividades religiosas, la Semana Santa, toma objeto de estudio. Los coordinadores Hernández y Rina abordan el ejemplo sevillano, para reafirmar su papel ritual y legítimo para con el franquismo. Franco intentó desprender la visión antropológica y cultivar la ortodoxa, reforzada por el rechazo anticlerical del régimen republicano. Las procesiones se militarizaron con símbolos y presencias como Millán Astray, Queipo de Llano o el propio caudillo. Referentes religioso y popular como es el Rocío almonteño, situó a su virgen en la exaltación tradicionalista y fascistizada. José Carlos Mancha describe la ritualización nacionacatolicista, con que el franquismo se volcó en esta multitudinaria peregrinación que ya, desde la guerra, fue nomenclada por algunos de los destacamentos militares. No le fue mucho mejor en ese afán de control político, a las fiestas en espacios periféricos. Del ámbito catalán. Jordi Carrillo nos habla de un "regionalismo franquista" que intentó arrinconar a la cultura catalana y apropiarse de sus símbolos, como sus fiestas mayores la sardana, los castellers o la...
Referência(s)